Esta es una historia contada a escala, para llegar a ella usamos lupas y lámparas mágicas, nos adentramos en un mundo extraño, desconocido y tan gigante como diminuto. Así conocimos a nuestros hermanos menores en esta infinita cadena de especies. Hemos viajado por miles de colores, formas y tamaños. Viajando aprendimos de ellos, de su fuerza, su capacidad para trabajar en equipo, su perseverancia, su fragilidad. En el camino soñamos y construimos historias, e imaginamos Chapolas que leen cuentos, Mantis que bailan tango, Grillos que predicen el futuro, Orugas que entre sueño y sueño aprenden a volar y Abejas Reinas que enloquecen. Es un mundo gigante de insectos peculiares, que cabe en un zapato creado por 80 niños, niñas y jóvenes.
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